La certificación forestal garantiza que la gestión en un bosque o plantación se realiza cumpliendo unos criterios de sostenibilidad. Se trata de un procedimiento voluntario que implica una acreditación por parte de una entidad independiente (entidad certificadora).
Los principales sistemas de certificación forestal son dos: FSC Y PEFC. Ambos sistemas son reconocidos a nivel mundial.
Estas normas especifican los requisitos que la organización debe cumplir en todos sus productos desde el origen hasta el consumidor final. La organización puede ser cualquier entidad que cultive, transporte, manipule o procese productos forestales en cualquier fase.
PEFC se define como una entidad no gubernamental, independiente, sin ánimo de lucro y ámbito mundial, que promueve la gestión sostenible de los bosques para conseguir un equilibrio social, económico y medioambiental de los mismos.
FSC se define como una organización global, sin ánimo de lucro, dedicada a promover la gestión forestal responsable en todo el mundo.